28 mayo 2011

Un indignado del sector

Los hijos de la Barcelona de los 70 cumplimos 40 años. 
Lo celebramos pobres, atropellados por la coca, indignados y todavía, todavía, esperando que suene nuestra flauta.
Esperamos, seguimos esperando. Todo el tecno y todas las revistas de diseño, la intelectualización del hype, el cool, la gafapasta, la interactividad y el skate frente al MACBA no nos han dado ni para un puto contrato indefinido. 
Cumplimos 40 años en el paro contratados indefinidamente por el INEM.
Por detrás los nini y por delante unos putos arquitectos de Barcelonas Activas que no se van a detener ni se van a largar si alguien no les echa.
Los que tenemos por detrás ni estudian ni trabajan. Los que tenemos por delante sólo comen y no dejan comer.
Somos los del branding y el coolhunting hasta los güevos. Con media sonrisa porque el coaching y el networking nos han enseñado la importancia del positive thinking a la hora de presentar nuestro último proyecto de comunicación.
Bien, pues ahí va nuestra última idea. Ya no os vamos a regalar más.
La idea consiste en que os den por culo. Y sí, lo habéis adivinado, vamos a hacer una web.
Desde el 92 hasta hoy hemos aprendido a razonar, conceptualizar y diseñar. Hemos aprendido que hay que divertirse mucho y que había mucho por aprender.
Vale. Ya nos hemos divertido y tenemos un montón de licenciaturas, másters y postgrados.
Ahora venimos a por lo nuestro. 
El proyecto de comunicación que os presentamos es nuestro abandono de cualquier propuesta, de cualquier intento, solicitud o presentación. Os presentamos a nosotros, y nos hemos hecho un contrato indefinido sin periodo de prueba.

11 mayo 2011

El desequilibrio del Digital Transmedia Storytelling

La definición de transmedia storytelling que más me ha llamado siempre la atención es la que asegura que el primer caso documentado es la Biblia.
Maravillosamente cierto: una narración fragmentada en una gran diversidad de plataformas (papel, vidrieras, iconos, cuadros, esculturas...) donde el espectador se hace su propia versión y todas las versiones confluyen en un único relato universal compartido por una "comunidad de usuarios".
Acabo de ver la explicación que hacen Gonzalo Martín y Massimo Martinotti y sus explicaciones añaden, a la primera definición, la dimensión digital del método: la convergencia digital y la participación del usuario.
Tanto una como la otra están envueltas, curiosamente, por un aura de ininteligibilidad. Si a mi padre le cuento eso del digital transmedia storytelling me pone cara de que le cuento algo súper-interesante a lo que, antes de que pueda acabar, ya ha renunciado a entender. ¡Pero si ni la directora de cuentas de la última agencia interactiva donde trabajé entendió jamás qué significaba ni para qué servía! 


Para convencerme a mí mismo de que el método es útil y sencillo me he dibujado el DTS (digital trans...blablá) de mi propia marca, o sea, de mí.
Me he puesto en la piel de un responsable de RRHH que me investiga en la red para saber si soy el perfil idóneo para el cargo y esto es lo que me ha salido.


Me he dado cuenta de que la elaboración de una estrategia bien cerrada, sin flecos, donde las interpretaciones que pretendemos generar en la mente del consumidor no se nos vayan de las manos y a la vez ofrezcan "salidas" que hagan sentir al usuario libre en sus "averiguaciones" para no mostrar un perfil de marca rígido y monótono, el relato debe estar en permanente cambio.
Mi web ha quedado obsoleta si la comparo con mi LinkedIn, y la tremenda velocidad con la que pueden generar significantes mi Tumblr y mi Twitter (y eso que no incluyo el facebook, que es la madre del cordero...) muestran un desequilibrio en el discurso estratégico que hacen incoherente a mi marca.
Desarrollar una planificación estratégica de marca a medio y largo plazo mediante redes sociales y narrativas fragmentadas multimediales exige la aceptación de un alto grado de incoherencia entre los core messages de la marca. Aceptar esos desequilibrios, darlos por hechos y aprender a jugar con ellos hasta convertirlos en un valor añadido es, creo, el auténtico reto del DTS.

09 mayo 2011

Fucking advice

Hem detectat un nou meme a Internet.
Pàgines de consells amb la paraula FUCK.
Pensem que la primera va ser la de "Good fucking design advice", no ho podem assegurar, però sí es pot dir que el fenòmen s'ha començat a estendre i no descartem la idea de muntar-nos-en una nosaltres. Se'ns acut una de consells gramaticals amb la paraula PUTA, com ara "La puta ortografia dels pronoms febles".
Mentres ho decidim us deixem els enllaços de referència:

1/ "Good fucking design advice"

2/"Good fucking marketing advice"

3/"What the fuck is my social media "strategy""

4/"What the fuck should I make for dinner"

08 mayo 2011

La eficacia del Transmedia Storytelling

Soledad Gallego Díaz ha reseñado hoy, en la edición impresa de El País, la aparición de "Fight of the Century", un impecable vídeoclip de hip-hop en el que los economistas Keynes y Hayek regresan del pasado para defender sus respectivas recetas económicas frente al gran dilema de la economía capitalista: si debe someterse a la regulación estatal o dejar que las leyes del mercado se autoregulen; y más concretamente qué hacer con el gasto público, si aumentarlo o recortarlo.
El clip es en realidad la segunda parte de una serie que empezó con la pieza de menor presupuesto "Fear the Boom and the Bust" y es, en palabras de su autor John Papola,
"(...) far and away the best thing I’ve ever created in my entire career so far".
John Papola era el director creativo de Spike TV, una filial de la MTV, y ahora tiene su propia productora, Emergent Order, donde hace spots como el de Burguer King, series como Robo Ralph y proyectos personales como Econstories, web de donde salen los vídeos en cuestión.
Con permiso de la periodista de El País, que merece todo nuestro respeto profesional, nos permitimos ampliar el enfoque del artículo y añadir que eso de que "la juventud" (parece que tanto da si norteamericana o española), se desinteresa por la política y que sólo atiende a Keynes cuando recita un flow en un vídeoclip bien producido, nos parece cuando menos cuestionable dada la ingente cantidad de propuestas de culture jamming, artivismo y hacktivismo de las que este blog trata de dar cuenta de vez en cuando y que aparecen cada vez más y mejores tanto aquí, como allí, en Francia, Reino Unido o incluso Afganistán.
Pero eso es harina de otro costal. Porque el asunto, en realidad, va de la eficacia del digital transmedia storytelling.
El señor Papola descubrió un día que le fascinan tanto la economía como la filosofía, pero al ser más de dirección creativa y publicidad, se alió con el economista Russ Roberts, famoso por algunos best sellers sobre economía y principalmente dedicado a la docencia en el centro de estudios Mercatus Center, una institución universitaria privada que trata de "eliminar la brecha entre política y sociedad civil mediante la investigación universitaria". Un rollete, nos parece, muy WASP y white trash que le encantaría a los de la UPF.
Entre la ambición pedagógica y política de Russ, con su Mercatus Center, y la facilidad e inquietudes creativas de la agencia de John, Emergent Order (peazo de nombre!), se crea el proyecto de transmedia storytelling Econstories, que aparece enlazado más arriba.
Uno de los resultados de esta alianza “didáctico-político-econo-publicitaria” es esta serie de vídeoclips donde el formato audiovisual y la viralidad del medio on-line se mezclan con la divulgación académica y un tibio pero evidente mensaje político, que la periodista o ha obviado o nos ha querido ahorrar.
En términos políticos, el caso nos parece flagrante. Puro márketing capitalista donde se hace saltar al ring a un Hayek que cae bien de inmediato, retratado como un pobre freak de mostacho hype y del que nadie se acuerda, y que –suponemos- aparece en sustitución de la auténtica bestia parda del pensamiento anti-Keynesiano: Milton Freedman. Keynes se representa como una celebrity a la que todo el mundo da la razón pero que en el ring se lleva más ostias que una pelota de béisbol.
En términos publicitarios, es una jugada maestra. Haciendo uso del método de digital transmedia storytelling, es decir, distribuyendo un “material didáctico” mediante varios formatos digitales convenientemente transformado en una ficción de códigos reconocibles extraídos de la cultura popular (vídeoclip, hip-hop, serie televisiva de abogados, cine de boxeo…) y fácil de entender (aparentemente no hay nada que entender, es sólo un buen vídeoclip), el mensaje (mola el estilo de vida americano y sus recetas económicas son tradicionales a la par que modernas) llega tan suavemente y con una amplificación tan eficaz que hasta una reconocida periodista del diario El País se rinde a él hasta confundirlo con todo lo contrario de lo que es en realidad.