14 abril 2010

Blog Spot

Why I write


In short I tried to think. I failed. My attention veered inexorably back to the specific, to the tangible, to what was generally considered, by everyone I knew then and for that matter have known since, the peripheral. I would try to contemplate the Hegelian dialectic and would find myself concentrating instead on a flowering pear tree outside my window and the particular way the petals fell on my floor. I would try to read linguistic theory and would find myself wondering instead if the lights were on in the
bevatron up the hill. When I say that I was wondering if the lights were on in the bevatron you might immediately suspect, if you deal in ideas at all, that I was registering the bevatron as a political symbol, thinking in shorthand about the military-industrial complex and its role in the university community, but you would be wrong. I was only wondering if the lights were on in the bevatron, and how they looked. A physical fact.
Excerpt Joan Didion’s Why I Write, originally published in The New York Times Magazine, December 5, 1976.

09 abril 2010

Microliteraturas

corpoetry


Naming, copywriting, poesía y microficción comparten la brevedad, la concisión y la creatividad como claves metodológicas. No es de extrañar que las conexiones entre unas y otras disciplinas haga que a menudo los namers sean poetas o los copys micronovelistas.
En este blog ya colgué un post sobre las conexiones entre la imagen poética y la imagen de marca, pero el tema da para más.
La ultra compactación de los mensajes a la que nos estamos acostumbrando gracias a Twitter, Facebook, los SMS's, las exigencias de la lectura en pantalla o de un titular de prensa, hacen que cada vez leamos más copys y menos textos. ¿No deberíamos estar muy contentos los de la profesión?


01 abril 2010

Dreampolitik


¿Qué tienen en común Paris Hilton, Grand Theft Auto, Las Vegas y un anuncio de McDonald's, con la política de izquierdas? No mucho, y eso puede ser un problema. Si la izquierda quiere ser una opción política válida para el siglo XXI debemos empezar a soñar. Soñar juega en favor de una política progresista que integre la fantasía y el espectáculo, las imágenes y los símbolos, la emoción y el deseo. En definitiva, una nueva estética política, una especie de "dreampolitik" creada no sólo para las próximas agendas políticas de izquierda sino también para ayudarnos a imaginar otras nuevas.

Stephen Duncombe:
Fundador del grupo Reclaim the Streets, sociólogo de la Universidad de Nueva York, autor de "Notes from Underground: Zines and the Politics of Alternative Culture, y editor de "Cultural Resistance Reader" y activista político-cultural que llevó a los Sex Psitols a la acción directa.

¿Pero cómo triunfar?
Stephen Duncombe y Steve Lambert están comprometidos con la causa del arte y la cultura como vehículos para transformar el mundo. Pero también quieren triunfar. ¿Cómo se pueden plantear el éxito si su objetivo es una utopía? Su blog es un work in progress para explorar esta y otras ideas similares